Los pistachos son una gran fuente proteínica de origen vegetal, siendo destacable su contenido de arginina (el aminoácido de la potencia). Así mismo, son muy ricos en ácido oleico, el cual ayuda a reducir el nivel de colesterol y de triglicéridos, así como la tensión arterial, y a regular el metabolismo de los lípidos y el equilibrio del peso corporal.
Aportan también fitoesteroles, y minerales (hasta 23!), destacando entre ellos el cobre, el magnesio, el fósforo y el calcio. Los pistachos también contienen muchas vitaminas, como la vitamina E y el ácido fólico, que gracias a su acción antioxidante reducen el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
El pistacho pelado crudo es un buen aperitivo por su poder saciante. Se utiliza ampliamente en repostería y heladería formando parte de pasteles, helados, turrones, bombones…
Pistacho crudo, de cultivo ecológico. El pistacho es la semilla del pistachero, un árbol pequeño procedente de oriente próximo, que se desarrolla bien en condiciones de baja humedad y altas temperaturas. El fruto, recubierto por una piel carnosa verde, contiene la cáscara con la semilla dentro, la cual a su vez se envuelve con una piel morada característica. Cuando madura, la cáscara se rompe y se abre parcialmente de manera abrupta, con un sonido audible.
